Hoy hablaré un poco de las heridas del alma, aquellas que de una u otra forma hemos sufrido todos, quizás para un aprenzaje. Podemos decir que el alma es la parte del ser que contiene las emociones y los pensamentos bajo el albitraje de la voluntad, es aquí donde se desencadena las guerras del corazón.
El espíritu es la persona es sí, es lo que somos, de acuerdo al lugar donde hemos nacido, de acuerdo a la época en donde hayamos nacido, de acuerdo también a la educación y a las creencias. A lo largo de nuestras vidas cambiamos nuestras creencias, y llevamos implicitos en nuestro subconsciente vivencias de otras vidas (reencarnaciones). Sabemos que somos un espíritu, con un alma, en un cuerpo. El estado en que se encuentra nuestra alma es importante ya que a traves de ello se determina nuestra convivencia con los demás., en nuestra alma poseemos las habilidades, la interacciones y comunicaciones con las demás personas; los conflictos de relación con los demás seres se deben a las diferencias que existen en la manera de ver la vida y la falta de madurez de la gente para identificar y manejar las emociones propias y ajenas.
Es por todo ello que el estado del alma afecta la calidad de las relaciones y la estabilidad.
Quien tiene un alma lastimada se le hace dificil desarrollar relaciones sanas, permanentes y estables., el alma se enferma al igual que nuestro organismo, esto cuando no esta bien alimentada. Cada herida del alma que no ha sido sanada afecta el presente y el futuro de nosotros.
Muchos conflictos que hemos tenido en nuestra vida empezando por nuestros padres o nuestros hijos, amigos, compañeros, entre otros, son el resultado actual de nuestra alma. Un ser que haya sido lastimado durante su infancia por alguien importante para él le cuesta establecer relaciones sanas en cualquiera de las etapas de su vida, a veces encontramos personas que a lo largo de su vida se han autocastigado con relaciones en la que siempre resulta víctima.
Las relaciones pasadas de cualquier tipo influyen en las actuales; algunos cargamos con el fantasma de los padres, o con el espectro de un familiar, amigo o vecino que nos robó la inocencia. Y que aún habiendo dejado tiempo sin verlos o hayan fallecidos han afectado nuestras vidas y estropean aún después del tiempo nuestras relaciones. Incluso aquellas que se dan con los seres más queridos. Imaginense si esto nos pasa con personas, familiares o no, que ya no están en nuestra vida diaria, ¿Qué tanto más con aquellos con los que aún tenemos contacto, que nos dañaron en el pasado? Todas esas situaciones desagradables que nos causaron en el pasado influyen en nuestra vida de manera general. Esto nos causa un desgaste emocional que afecta nuestras relaciones, aunque ustedes no lo crean.
Las heridas en el alma menoscaban la autoestima y seguridad personal.
Pero nuestra naturaleza es sabia y poseemos un potencial auto-regenerador del alma, es un mecanismo para fortalecer la autoestima y librarnos de esos espectros, fantasmas que nos destruyen.
Quizás algunos de nosostos fuimos heridos por nuestros padres, nos colocaron calificativos, nos compararon, fuimos objeto de burlas por parte de ellos; y esto mi querido lector es algo que causa graves heridas al alma, y puede conllevar a la destrucción de un ser sino es lo suficientemente fuerte para soportar este tipo de herida.
Por ello utilicemos nuestro potencial auto-regenerador. Oremos, y cuando digo orar no es irse a una iglesia o algún otro centro a practicar una religión; es hablar con Dios para liberarnos de estos mostruos que acaban con nuestra vida emocional, física, y espíritual.
Trabajemos el perdón, lo cual no quiere decir que olvidemos lo que nos han hecho. Porque en verdad podemos perdonar pero no olvidar. Hay personas que dicen que el verdadero perdón es cuando uno olvida, pero yo no estoy de acuerdo con esto. Yo soy una persona que puedo perdonar pero no olvido; es como cuando te cortas, te puedes olvidar cuando sane la herida que te hiciste, pero te acordaras de esa cortada cada vez que te veas la cicatriz.
Lo importante es que cuando te acuerdes de eso, lo recuerdes como una experiencia para andar con más cuidado
Es asi, suele pasar, que hasta nuestros propios familiares nos causan estas heridas en el alma.
ResponderEliminarMe parece un publicación demasiado Genial, es muy esencial. Me encanto